Engarzada en nuestra historia nacional está la figura de la patrona departamental, bajo cuya protección el General Manuel Belgrano pusiera a las tropas patriotas antes de la Batalla de Tucumán, y a la que adjudicara luego el triunfo obtenido en tal contienda.  En el parte que envió a Buenos Aires el general escribió: «La Patria puede gloriarse de la victoria que han obtenido sus armas el día 24 del corriente, día de Nuestra Señora de la Merced, bajo cuya protección nos pusimos”.  Con posterioridad, le entregó su bastón de mando y la nombró Generala y Patrona del Ejército, siendo reconocida como tal hasta el día de hoy por el Ejército Argentino. La historia provincial también la reconoce como la primera pobladora de las tierras maipucinas, en un gesto simbólico luego de que su imagen no sufriera daños en el terremoto que destruyó gran parte del territorio en 1861 y que afectó también la capilla que la albergaba, en Cruz de Piedra.